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Faro de Punta Lasserre
también llamado Faro del Fin del Mundo o San Juan del Salvamento
Su construcción en 1884
"Hace ya muchos años, en avanzadas horas de la tarde del 18 de abril de 1884, llegamos a bordo de la cañonera "Paraná" al puerto de San Juan del Salvamento. Nos acompañaba el transporte "Villarino". Fondeamos en la ensenada de afuera. Rachas violentas saludaron nuestra entrada. Todo lo que nos rodeaba tenía un aspecto agresivo; algunas aves, espantadas, levataron su vuelo y se alejaron. Elegidos los fondeaderos, cada buque ocupó su puesto; luego cayó la noche, calmaron los vientos y un silencio sepulcral invadió la escena.. "Veníamos fatigados. Desde nuestra salida de Buenos Aires, nos habían combatido los malos tiempos. Durante el viaje recalamos en Puerto Roca, Deseado, Santa Cruz y San Sebastián de Tierra del Fuego. Era nuestro comandante superior el coronel Lasserre, recientemente nombrado jefe de la División Expedicionaria al Atlántico Sur. "En Santa Cruz esperamos la incorporación de los buques divisionarios que eran el "Villarino", "Comodoro Py", los cúteres "Santa Cruz", "Bahía Blanca", "Patagones", la corbeta "Cabo de Hornos" y la barca "María T." y, una vez reunidos, se les impartieron órdenes para que en determinada fecha se encontraran en la isla de Los Estados. El 13 de abril zarpamos la "Paraná", y el "Villarino", mandado este último por el capitán Spurr, rumbo a estos mundos. "El viaje de Santa Cruz a la isla lo hicimos en cinco días, durante los cuales reinó siempre tempestad, la que más de una vez nos obrigó a ponernos a la capa. Veníamos a instalar en este puerto una subprefectura y una farola en el peñón de entrada. "Dos días después llegaron la "Comodoro Py" y los cúteres "Patagones" y "Bahía Blanca" y la barca "María T." Entonces el puerto cambió de aspecto: hasta en el fondo de la segunda ensenada se veían buques fondeados. Botes a remo y velas iban y venían, y se notaban por las playas animados grupos de marineros que con sus cantos y uniformes alegraban aquellos parajes hasta entonces desiertos. "Muy en breve se iniciaron los trabajos. Hacía frío y nevaba. Estudiado el paraje para construir el muelle, marineros de todos aquellos buques, dirigidos por un oficial, principiaron a acarrear piedras y distribuirlas en el sitio elegido, dándole forma y consistencia en una larga extensión perpendicular a la costa, de 54 metros de largo por 3 de ancho, revistiendo luego aquel espigón con listones de quebracho y adicionándole en el extremo libre una escala por banda. Y así que esto se realizaba, otros se ocupaban de desmontar parte de la barranca en plano inclinado para construir sobre ella una escalera de quince metros de altura que, descansando sobre el muelle, permitiese el acceso a la parte superior. (Continúa) NOTAS 1.
GARCIA BASALO, J.Carlos. Presidio Militar en la isla de los Estados. En:
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